Con la llegada inminente del Super Bowl LVIII entre los San Francisco 49ers y los Kansas City Chiefs, los hogares estadounidenses se sumergen en la preparación para disfrutar del emocionante evento deportivo junto a familiares y amigos. Al igual que cada año, en esta edición, la final de la NFL viene acompañada de fluctuaciones en los precios de los alimentos.
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En el frente positivo, algunas opciones de alimentos se presentan como elecciones más asequibles para los fanáticos ávidos de celebrar el Super Bowl. Las alitas frescas y congeladas encabezan la lista, con precios promedio de $3,26 y $3,17 por libra, respectivamente, reflejando descuentos del 5% y 11% en comparación con enero de 2023. Los camarones también se suman a la oferta accesible, con un costo promedio de $8,84 por libra, mostrando una reducción del 6,4%.
Sin embargo, no todas las noticias son favorables para los aficionados a la gastronomía del Super Bowl. La carne de res molida experimenta un aumento notable del 12%, alcanzando un precio promedio de $4,25 por libra, atribuido principalmente a la sequía que afecta la producción de carne vacuna en el suroeste del país. Asimismo, los amantes de los nachos y la salsa enfrentan incrementos del 6% y 3%, respectivamente, mientras que las papas fritas ven un alza del 5% debido a mayores costos de mano de obra y embalaje.
En el mundo de las bebidas, la cerveza experimenta un modesto aumento del 0,7%, situándose en un promedio de $1,75 por litro. Aunque las sodas de 2 litros muestran una ligera disminución del 0,8%, las latas de 12 onzas sufren un incremento del 4,8% debido a los costos del aluminio y la demanda del consumidor. En resumen, mientras algunos alimentos ofrecen alivio a los presupuestos, otros desafían la tradición del Super Bowl con precios al alza, creando una experiencia gastronómica con matices económicos en esta emocionante edición del evento deportivo más esperado del año.