En el Real Madrid todavía no se creen lo que ocurrió en el partido contra el Valencia en Mestalla, en el club blanco han manifestado su insatisfacción a todos los niveles tras el empate 2-2 que les impide mantener la ventaja sobre Girona y Barcelona, a falta de que estos ganen sus respectivos partidos.
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Gil Manzano, árbitro principal del controversial compromiso está en el ojo del huracán por considerarse que es su única responsabilidad no convalidar el gol de Jude Bellingham en la última jugada del encuentro, pues el colegiado pitó el final del partido justo cuando Brahim Díaz efectuaba el centro que finalmente terminaría adentro de la portería 'Ché'.
En el diario Marca resaltan que en el seno del CTA (Comité Técnico de Árbitros) hay mucha desazón respecto a la decisión tomada por el árbitro, ya que no fue contundente a la hora de señalar el final de un partido que ya estaba muy alto de revoluciones. El Madrid se seguirá quejando pese a que, hasta ahora, Manzano había sido de los pocos árbitros que contaban con el buen visto de los merengues.
Además de pitar el polémico final que no convalidó el gol, el colegiado también decidió expulsar a Jude Bellingham por su airada protesta y eso también es causa de molestas para un Real Madrid que se siente perseguido.
No cabe duda de que las decisiones del juez en la última jornada podrían afectar su estatus que lo sitúa como uno de los mejores colegiados del fútbol español, a partir de ahora tocará esperar para saber si se toma alguna decisión directamente sobre el árbitro y con el pasar de los días irá bajando la tensión.