Jugar el Abierto de Estados Unidos — y el primer Grand Slam de su carrera — no estaba en el radar de Montserrat González.
Cuando se cerraba la inscripción para la fase previa del torneo, el ranking de la paraguaya de 22 años estaba al límite para acceder a esa etapa.
"La semana del cierre era la 229. Estaba en Europa y me decía: 'aquí no entro''', relató la actual 192 del ranking de la WTA. "Al final fui una de las últimas en entrar. Estaba en Europa y decidí venir para acá".
Fue una decisión acertada. González procedió a ganar sus tres partidos de la ronda clasificatoria para abrirse paso a su primer Slam. Y en su bautismo dio cuenta 7-5, 6-2 de la montenegrina Danka Kovinic, número 54 del ranking.
"Estoy viviendo el sueño que siempre tuve desde chica, el poder estar jugando contra las mejores del mundo, y es una oportunidad que estoy aprovechando", declaró.
Lo más importante es que González le ha dado un vuelco a su temporada, luego que una lesión en el hombro derecho la mantuvo alejada de las canchas durante tres meses. Volvió a jugar en mayo, cuando era la 334 del mundo.
Su expedición a Nueva York le ha servido para garantizarse una bolsa de 77.188 dólares, que ha superado con creces los 16.764 dólares que había devengado principalmente en torneos de la gira de la ITF.
"La verdad que el US Open me cambia mucho. Esto de gran ayuda para seguir jugando", añadió.
Bromeó con que la WTA no había subido una foto suya en su portal. "Soy una completa desconocida", dijo.
Eso se resolvió el jueves.
Una beca del gobierno paraguayo le sirve para solventar parte de sus viajes. No puede darse el lujo de que su entrenador, Alfredo de Brix, le acompañe en las giras. Christian De Los Ríos, el hermano de la retirada tenista paraguaya Rossana De Los Ríos, es quien le ayuda estos días en Flushing Meadows.
"Ne es fácil para sudamericanas, menos una paraguaya, poder competir en esta clase de torneos. Esta es una oportunidad que estoy aprovechando.", dijo González. "Me preparé bien físicamente y mentalmente. Lo que más quería era jugar de nuevo. Estar parada por una lesión es una experiencia amarga".
El viernes, González enfrentará a la checa Karolina Pliskova, la undécima del ranking y que hace dos semanas se adjudicó el título en Cincinnati para negarle el primer puesto del ranking a la alemana Angelique Kerber.
"Estoy muy tranquila y disfrutando esto, esto lo veo como un proceso de aprendizaje. Mi idea es ir mejorando de a poco", resaltó la paraguaya. /AP