El estadounidense John Isner manifestó que la decisión de jugar el torneo de Buenos Aires sobre tierra batida no disminuye su potencial de juego y declaró en forma risueña que está listo para la acción tras recuperarse luego de la derrota de su equipo, Carolina Panthers, en el Super Bowl.
"No dormí bien luego de la dura derrota en el Super Bowl de las Panteras. Igualmente fue una gran temporada de mi equipo, con el que comparto fanatismo con 'Pico' Mónaco", dijo el actual número 12 del mundo.
"No es común que los tenistas de mi país vengan a jugar a la tierra batida de Argentina, pero nunca había estado en este país antes y no me quedan muchos años en mi carrera. Y creo que para mi juego puedo desempeñarme mejor aquí que bajo techo", enfatizó Isner ante la consulta sobre los motivos de su presencia en el ATP 250 argentino.
Luego de esta serie sobre arcilla en Buenos Aires y Río de Janeiro, el tenista de 30 años nacido en la ciudad de Greensboro, deberá regresar a Australia para representar a su país en la Copa Davis en la hierba de Kooyong y luego volver a su patria para disputar los Masters 1000 de Indian Wells y Miami.
"Pasar de arcilla a hierba o pista dura no requiere grandes ajustes. Así es el calendario. Luego de estos dos torneos volveré a Australia a jugar la Copa Davis y luego otra vez a pista dura en los Masters 1000 en mi país", explicó.
Con respecto a sus 2,08 metros de altura y su estilo de juego, sentenció: "La ventaja de ser tan alto es que logro muy buenos ángulos, sobre todo en el servicio que es mi mejor tiro. La desventaja es que no puedo moverme tan rápido y bien como Ferrer, Fognini o Nadal, pero es algo en lo que siempre estoy trabajando"
"La devolución es muy importante para los mejores jugadores del mundo. El buen servicio es importante pero los top 5 además tienen una gran devolución, que es un golpe importante", aclaró.
"La victoria en Copa Davis ante Roger Federer fue la mejor en mi carrera en la tierra batida, pero también conseguí vencer a Rafael Nadal. Este torneo en esta semana del circuito es un gran desafío para mí y es el evento más importante de la semana", expresó ante la consulta sobre sus alegrías más importantes en la superficie de este certamen argentino.
Por último se refirió al ritual que realiza antes de servir donde pasa la pelota entre sus piernas: "Empecé de pequeño a los diez años cuando además de tenis jugaba al baloncesto. Es un tic que hago casi sin pensar y me sirve para concentrarme". EFE
09/02/2016