El dueño del club Wigan dijo que renunciará a su cargo si la Asociación de Fútbol inglesa lo halla culpable de racismo por sus comentarios sobre judíos y chinos.
Dave Whelan dijo al canal británico ITV que "si incluso insinúan que soy culpable, renunciaré de inmediato a mi puesto como director de la junta de Wigan Athletic".
La FA investiga los comentarios de Whelan a un periódico en los que defendía su decisión de contratar a Malky Mackay como técnico del club que milita en la segunda división del fútbol inglés. Mackay es investigado por enviar mensajes de texto racistas y antisemitas.
Al comentar sobre un mensaje de texto de Mackay sobre los judíos y el dinero, Whelan dijo: "Creo que los judíos aman el dinero más que los demás. No creo que eso sea algo ofensivo". También dijo que no le pareció incorrecto un mensaje enviado por Mackay en el que utilizó una palabra consideraba insultante. /AP