Manuel Vargas/@MA_Vargas7
El pasado 4 de enero de 2016 marcó un antes y un después en el devenir de la temporada madridista. Ese día se nombró como técnico del primer equipo a Zinedine Zidane y la jugada no lo pudo salir mejor a Florentino Pérez.
Zidane tiene un mérito innegable, que por mucho que sus detractores quieran menospreciar, la realidad habla por sí sola. Tomó un equipo diezmado, dado por muerto desde antes finalizar el 2015, con muchas dudas y convulsionado por problemas internos. El francés calmó las aguas y tranquilizó a todos con sus declaraciones y comenzó a llevar al equipo hasta su punto más alto con un título para la historia.
Revivir la Liga
Uno de los méritos más importantes que tuvo Zinedine Zidane fue traer la competitividad nuevamente del Real Madrid. Fuera de Copa del Rey y en La Liga muy distanciados del Barcelona, Zidane fue haciéndole espació a los jugadores que Rafael Benítez había dejado olvidados, devolviendo la competitividad al grupo.
Cierto, las lesiones colaboraron un poco en eso, pero la confianza para todos vino del francés, que haciendo oídos sordos al palco, hacía sus alineaciones por méritos de los jugadores no por el dinero que costaron.
Luego de la derrota ante el Atlético Madrid en Liga, se decantó de forma definitiva por Casemiro y encontró al fin ese equilibrio que faltaba. El campeonato local dio un vuelco con la victoria ante los blaugranas, permitiéndoles revivir una Liga que parecía ya terminada.
No consiguieron el título, perdiéndolo al quedar solo un punto por detrás del Barcelona, pero regresó la competitividad manteniendo activos a sus jugadores de cara a todas las competiciones en las que seguían con vida. Al final, con una gran dirección técnica de Zidane, los suyos cerraron la Liga con 12 victorias consecutivas y muy animados para el reto final.
Desenlace con la Undécima
La historia en Champions League fue parecida, aunque cargada de más emotividad. Zidane llegó para afrontar el campeonato europeo desde los octavos de final.
El Real Madrid fue superando las etapas y los rivales fueron cayendo contra el poderío de los blancos. La serie de cuartos de final será especialmente recordada por la remontada que realizó el equipo de Zidane, comandados por Cristiano Ronaldo, en el Santiago Bernabéu. Todo quedó preparado para una final contra el vecino citadino, el Atlético Madrid.
Una final apasionante, en la que una lesión y el buen hacer de los de Simeone trastocaron los planes de Zidane. Los penales definieron al campeón y allí los merengues fueron mejores. Zidane necesitó 115 días para relanzar a un equipo moribundo y llevarlos a obtener el título de clubes más importante del mundo.
El francés entró en la historia al convertirse en el séptimo personaje en ganar la Champions como jugador y entrenador, siguiendo los pasos de otros como Guardiola, Ancelotti, entre otros. Además Zidane también fue parte de la “Décima” al ser segundo entrenador del técnico italiano Carlo Ancelotti en el 2014, convirtiéndose en el primero en ganarla en estos tres roles.
Zidane tiene un mérito enorme, ganándose la oportunidad de plasmar su proyecto para la siguiente campaña y también de poder continuar creciendo como un entrenador de élite con el equipo de su vida.
Lunes 30-05-2016