Antonio Rudiger se puso la capa de héroe para salvar a un Real Madrid que sufrió, y mucho, ante un aguerrido Mallorca, al que solo derrotó con ese solitario encuentro con la red. La anotación del alemán supuso poner su nombre en la historia dorada del club porque quedará en los registros que marcó el gol 6.000 de la entidad merengue en sus 122 años.
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El estadio Santiago Bernabéu fue epicentro de este duelo clave para 'La Casa Blanca', que necesitaba ganar para asegurarse ser el campeón de invierno. Eso sí, los visitantes no pusieron fáciles las cosas, de hecho, pudieron abrir el marcador en múltiples ocasiones.
Hasta dos disparos del Mallorca dieron en el travesaño del arco defendido por Andriy Lunin, el primero en el minuto 41' por obra de Antonio Sánchez y el segundo al 8' del segundo tiempo, por intermedio de Samu Costa. En el careo de los remates al palo lo devolvió al 23' de la segunda parte un Brahim Díaz, que estrelló un cabezazo con el valla totalmente en solitario.
Ya en las postrimerías del compromiso llegó la anotación de Rudiger (al 78'), que salvaba los muebles para el Real Madrid y le daba los tres puntos que necesitaba el equipo de Carlo Ancelotti para seguir líderes de esta edición liguera, con 48 puntos.
Ahora, independientemente lo que haga el Girona, que de ganar en la jornada contra el Atlético de Madrid llegaría a la misma cantidad de puntos que los merengues, el Madrid seguirá siendo el primero en la tabla de posiciones por haber vencido al conjunto revelación 3-0 en las primeras jornadas de la competición.