CSKA de Moscú sorprendió en el estadio de la Luz a un Benfica que no supo concretar sus oportunidades y acabó sufriendo una remontada (1-2) gracias a los goles del brasileño Vitinho, de penalti, y del joven ruso Zhamaletdinov.
Las "Águilas" entraron con el pie izquierdo en la fase de grupos de la Liga de Campeones y, a pesar de que controlaron el partido en la primera parte, pecaron de poco agresivas y tuvieron problemas para superar a la defensa rusa.
Después del descanso, cuando por fin se pusieron por delante con un tanto del suizo Seferovic, un desafortunado penalti cambió el rumbo del encuentro y dio inicio a la rápida remontada del CSKA, que sale de Lisboa con una victoria inesperada que le coloca segundo en el grupo A, que lidera el Manchester United.
La ocasión más clara del Benfica llegó desde los pies del defensa español Álex Grimaldo, el catalán se sacó un disparo con el pie izquierdo cuando el internacional ruso Akinfeev ya estaba batido que golpeó el poste y se fue fuera.
Seferovic avisó con un cabezazo nada más al salir de los vestuarios y un minuto después enganchó un centro del serbio Zivkovic a la entrada del área y remató al primer poste para hacer gol.
Pero la felicidad encarnada no duró ni quince minutos: un desafortunado penalti de André Almeida, que tocó el balón cuando intentaba apartar el brazo para evitar precisamente una pena máxima, fue un mazazo para las "águilas".
El brasileño Vitinho no tembló y batió a Bruno Varela, que esta noche vivió su debut en Liga de Campeones y, aunque lo intentó, no consiguió evitar sufrir un segundo gol en el 71.
Golovin dejó el balón a Vasin a la entrada del área y el ruso intentó el remate, pero Varela fue rápido y consiguió defender, pero no sobrevivió a un segundo remate del joven Zhamaletdinov, que acababa de salir al campo por el lesionado Olanare y firmó la remontada.
Fuente: EFE