Daniel Martínez Pérez / @DanielMartPerez
Hay jugadores que marcan una época en sus equipos, pero Zinedine Zidane puede presumir de ser uno de los jugadores y entrenadores más relevantes en la historia de un club tan grande como lo es el Real Madrid. El francés sabe lo que es levantar la UEFA Champions League hasta en cuatro ocasiones: una como jugador, una de asistente técnico y dos como el timonel principal de la casa blanca.
En 2002, “Zizou” anotaba frente al Bayer Leverkusen una volea que se ha convertido en el mejor gol en la historia del certamen, y que daba la novena Copa de Europa al Madrid. Doce años después (2014) el mago estaría a la diestra de Carlo Ancelotti para levantar la tan anhelada “Décima”, una que se logró tras golear (4-1) al Atlético de Madrid en Lisboa.
Dos años después (temporada 2015-2016), y con Rafa Benítez dejando el banquillo madridista, Zidane, entrenador del filial, recibe la oportunidad de tomar el primer equipo, uno al que condujo hasta la onceaba Copa de Europa tras superar una vez más a los colchoneros, pero esta vez en la tanda de penales.
En la siguiente campaña, Zidane lo volvió hacer: metió al equipo en la final, aunque en esta ocasión debían medirse a una aguerrida Juventus en Cardiff. Sabiendo que nadie había levantado la “Orejona” dos veces de manera consecutiva bajo el nuevo formato (que arrancó en 1992), el Madrid rompió el molde y goleó (1-4) a la “Vecchia Signora” para celebrar la duodécima Champions.
Además de esto, el DT también se alzó con La Liga, una que no se ganaba hacía cuatro años. Estos registros hablan por sí solos de un hombre que brilló en el terreno de juego cuando defendió la casaca blanca, y que ahora lo hace aún más desde el banquillo.