Manuel Vargas || @MA_Vargas7
Los octavos de final de la Champions League dieron inicio con cuatro encuentros magníficos. Todos ellos dejaron detalles para analizar, pero unos destacan más que otros.
Bayern Múnich y Paris Saint Germain sobresalen sobre el resto por sus espectaculares victorias; en el punto medio está el triunfo del Real Madrid; y lo peor de esta jornada fueron sin duda el Barcelona y el Arsenal.
Lo mejor
Las aplastantes victorias del PSG y el Bayern Múnich, el primero por 4-0 y el segundo por 5-1, los dejan con pie y medio en los cuartos de final de la competición. Los parisinos afianzados en un gran Di Maria, unos certeros Cavani y Draxler, y bien sostenidos por un trio como Rabiot, Matuidi y Verratti lograron un triunfo consagratorio combinado con un resultado esplendido.
Si consiguen mantener su buen hacer en el Camp Nou, en donde el Barcelona saldrá con todo, terminarán de sorprender a todos y sellar un boleto a los cuartos de final que ya comenzaron adquirir el pasado martes.
El Bayern Munich dejó muy claro que es uno de los candidatos más serios para ganar esta Champions y confirmó una vez más las carencias que tiene este Arsenal de Arsene Wenger. Robben, Lewandowski, Müller y Thiago Alcántara opacaron el gol y la efímera felicidad que logró Alexis Sánchez. Los bávaros aplastaron al equipo inglés con un futbol tan rápido y prodigioso como efectivo, por lo que ahora deberán viajar a Londres y mantener su gran ventaja para seguir avanzando.
Lo bueno
Real Madrid dejó una buena presentación en este partido de ida de los octavos de final. Su victoria por 3-1 los pone cerca de los cuartos, pero deberán cuidarse de ese gol conseguido por el Napoli, ahora que el siguiente choque será en su casa, en San Paolo.
Sin embargo, las buenas sensaciones y el buen juego de los merengues hace dudar a muy pocos de que el objetivo de avanzar pueda lograrse.
Lo malo
Definitivamente lo peor de la jornada lo protagonizaron el club blaugrana y los gunners. El Barcelona salió totalmente irreconocible ante los franceses; pese a que algunas estrellas no aparecieron, varios jugadores jugaron sin la intensidad necesaria y en la pizarra Emery opacó a Luis Enrique. El conjunto catalán no supo reaccionar y mucho menos aplicar algún juego reconocible para buscar el resultado que es lo verdaderamente preocupante y lo que hace temer que la remontada sea una quimera.
El Arsenal, tenía muchas esperanzas puestas en Champions, pero una vez más parece que todo se volverá a terminar para ellos en octavos de final. Solo Alexis Sánchez pareció relevarse a un conjunto alemán muy superior, pero el chileno solo no pudo y la eliminatoria está prácticamente sentenciada.
Faltan los partidos de vuelta y mucho tendrán que hacer estos equipos para revertir la difícil situación en la que quedaron; aunque por ahora es en Paris, Múnich y Madrid donde la felicidad se encuentra.