Alfredo Coronis A./ @alfredocoronis
Todo termina donde empezó. Paraguay, en septiembre de 2015, significaba el arranque de una nueva ilusión tras el sueño esquivo de ir a un Mundial. Hoy, gracias al nuevo calendario de Conmebol, toca cerrar en tierras guaraníes una amarga eliminatoria, pero mirando hacia adelante, con una generación promisoria que ya está teniendo un rodaje interesante.
El partido no termina siendo de trámite. Paraguay recuperó esperanzas al ganarle a Colombia en Barranquilla, y aunque depende de una calculadora ir a Brasil, el primer paso debe ser ganar y lo buscará ante Venezuela.
La Vinotinto trabajó hasta el domingo en San Cristóbal, sede del pasado compromiso ante Uruguay. Dejó en Venezuela a algunos elementos del torneo local como Juan Colina, Pablo Camacho o Samuel Sosa (se reportaron a sus clubes). Hoy no estará disponible Mikel Villanueva por acumulación de cartones y José Manuel Velázquez recibió permiso del cuerpo técnico para atender un tema familiar delicado.Pero regresan Yangel Herrera, Arquímides Figuera y Rolf Feltscher, ausentes por acumulación de amarillas ante Uruguay.
Dudamel ha hablado en esta doble fecha de “continuidad” y se espera que el once no varíe mucho respecto al que enfrentó a Uruguay, claro, con el ingreso de Herrera y de Wilker Ángel junto a Chancellor en el centro de la defensa.
“Vamos a jugar el último partido de la eliminatoria en un ambiente formidable, en inmejorables condiciones para disfrutarlo, jugarlo y ganarlo, de esa manera lo vamos a plantear. La misma situación en la que llega Paraguay, llegó Colombia, Argentina y Uruguay, intentando y pretendiendo superar a Venezuela para garantizar su presencia en Rusia 2018”, contó el estratega Rafael Dudamel.
Por su parte, el cuadro local llega sin el volante del Olimpia Richard Ortiz, por acumulación de tarjetas y, además de la baja por lesión de Víctor Cáceres. A los guaraníes les sirve un empate entre Perú y Colombia, más derrota de Argentina.