Manuel Vargas | @MA_Vargas7
El fútbol a lo largo de su historia siempre ha tenido, y tendrá, personajes icónicos que marcan un antes y un después desde que aparecen pisando el césped. Di Stéfano, Pele, Cruyff, Maradona, Zidane; ahora Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, son algunos de ellos, pero desde el inicio del mileno no hubo ninguno que pudiera igualar la magia de un brasileño que con su sonrisa y alegría cautivo al mundo entero.
Ronaldo de Assis Moreira, mejor conocido como Ronaldinho, revolucionó el fútbol a principios de siglo. Sus regates, goles, tiros libres, irreverencia y genialidad, le dieron un nuevo concepto al balompié que no solo dejaba perplejos a sus rivales sino a un mundo que quedó maravillado por todo lo que salía de sus botas.
Mucho se puede hablar de todos sus increíbles logros, pero tal como su camiseta, hay 10 momentos especiales en los que su sonrisa brilló como nunca.
La alegría llegó a Barcelona
En agosto de 2003, el brasileño fue presentado en el Barcelona ante un Camp Nou expectante por ver a aquel jugador que venía de maravillar en el Mundial de un año antes y de dejar toda su magia en el PSG. No pudo ganar la Liga pero levantó a un Barça perdido para llevarlo a un digno subcampeonato, pero ese sería el inicio de un equipo totalmente glorioso.
Ser el mejor del planeta
El Balón de Oro, el premio individual más prestigioso del planeta y el que solo unos cuantos han podido ganar, no podía faltar en el palmarés del brasileño. Ronaldinho obtuvo la distinción como el mejor jugador del planeta en el 2005, un año en el que ganó la Liga con el Barcelona y la Copa Confederaciones con Brasil.
Además, un año antes y en ese mismo 2005, también ganó el FIFA World Player. El galardón otorgado por el máximo ente del fútbol lo premió por su fabuloso accionar. Dos años en los que fue el mejor y nadie podía dudar eso.
El Bernabéu de pie
Con una Liga ya en el bolsillo, de la temporada 2004-2005, otra ya se estaba gestando para el 2006 y en el camino dejaría una presentación de lujo ante su máximo rival: El Real Madrid. En el Santiago Bernabéu el 10 blaugrana dio un verdadero espectáculo. Jugadas magnificas, pases, controles, regates, además de dos goles, le hicieron ganarse los aplausos del público rival, algo insólito siendo este del Barcelona, pero es que ese día aplaudirlo era lo único que se podía hacer.
Segunda vez campeón en España
En el 2006 el Barcelona completaría una temporada en Liga increíble. Comandados por un Ronaldinho intratable, los azulgranas se consagrarían campeones con 82 puntos, 12 más que el Madrid, y con 17 goles del brasileño. Esta fue la segunda y última Liga de ‘Dinho’, pero sin duda una de las más inolvidables, por como contribuyó y por como la coronarían con otro trofeo.
Y llegó la soñada Champions
El sueño era que el club catalán ganara su segunda Champions League en la historia, algo que se aspiraba cuando se trajo al crack brasileño y algo en lo que él no fallaría. Sus actuaciones catapultaron al Barcelona hasta aquella final épica de 2006 en el Stade de France contra el Arsenal. Ronaldinho fue nombrado mejor jugador torneo y con él el Barcelona llegó al éxtasis.
La Libertadores para hacer más historia
Solo nueve futbolistas en la historia han conseguido proclamarse campeones de la Champions League y de la Copa Libertadores, Ronaldinho, claro está, es uno de ellos. En el 2013 jugaba para el Atlético Mineiro y con el equipo galo hizo un excelente torneo para imponerse en la final al Olimpia de Paraguay. Muchos lo veían acabado, pero él una vez más les devolvió una sonrisa y ganó otro título para agrandar su leyenda.
No todo fue con los clubes. Con la selección de Brasil Ronaldinho conquistó los títulos más importantes en la absoluta y también uno con la Sub-17.
Su primera gloria con Brasil
Aunque fue un campeonato Sub-17, que sea Mundial lo hace muy especial. En 1997, en Egipto, Ronaldinho maravilló a todos y dejó muestra de lo que ya se veía venir. Este fue el primer trofeo con la selección canarinha de un Ronaldinho que sería su estandarte los próximos años.
Con Brasil reinó en América
Ya siendo parte de la selección mayor, Ronaldinho comenzaría conseguir éxitos y todo inició con la Copa América de 1999. Pese a no entrar regularmente entre los titulares, sí estuvo en el equipo con obtuvo el título; de hecho Venezuela lo sufrió con un golazo. Fue allí donde su historia de amor con Brasil empezaría.
Un trofeo más al saco con la canarinha
El brasileño pudo ganar los trofeos más preciados a nivel de selecciones y fue con la Copa Confederaciones de 2005 con la que completó el círculo. Con un buen equipo, Brasil asistió al ensayo de la Copa del Mundo que un año después se celebraría en Alemania y con tres goles, uno de ellos en la final contra Brasil, el crack conquistó la única copa que le faltaba con su selección.
La más codiciada de todas
En la historia solo un jugador puede presumir de haber obtenido todos los premios más prestigiosos a nivel de clubes, a nivel de selección y también los individuales; ese futbolista no es otro que Ronaldinho. Sin embargo, el que todos quieren, el más codiciado de todos, lo consiguió en el Mundial de Corea y Japón 2002. En ese torneo Brasil arrasó y una de sus piezas claves fue Ronaldinho. Participando en cinco partidos y anotando dos goles, espectacular uno de tiro libre ante Inglaterra, fue protagonista en la quinta Copa del Mundo conquistada por Brasil.
Los elogios se quedarían cortos para resumir los éxitos de este fuera de serie. Su alegría siempre contagio a todos, su fútbol será recordado por lo mágico que era y su sonrisa estará en el recuerdo de muchos porque sus acciones en el campo le sacaron muchas de ellas a millones que aún hoy se emocionan al rememorar lo feliz que un tal Ronaldinho los hacía cada vez que un balón caía en sus pies.