El Comité Olímpico italiano (CONI) anunció hoy que la Federación de Fútbol transalpina (FIGC), cuyo presidente, Carlo Tavecchio, dimitió el lunes, tiene tiempo hasta el 11 de diciembre para nombrar a sus nuevos directivos.
Si la FIGC no consigue elegir a su nueva cúpula directiva en las próximas dos semanas, el CONI empezará el trámite para nombrar un comisario que se ocupe de gestionar el organismo futbolístico transalpino a la espera de que se llegue a las elecciones.
Dicha decisión fue tomada hoy por el presidente del CONI, Giovanni Malagó, tras reunirse con sus colaboradores para analizar el complicado momento del fútbol italiano, cuya selección vivió un fracaso histórico al no clasificarse para el próximo Mundial.
"Esto es una ola que aplasta todo y a todos. No sería de personas serias disimular que nada haya pasado. Mi posición es clara, categórica. Hay que reformar el fútbol italiano", declaró Malagó en una rueda de prensa organizada al finalizar la reunión.
El máximo mandatario del CONI consideró que poner la FIGC bajo el control de un comisario es la única solución para intentar salir de este momento, pero reconoció que por ahora no se dan las condiciones jurídicas para hacerlo.
De hecho, el ya expresidente de la FIGC Tavecchio detiene hasta el 11 de diciembre el cargo de comisario de la Liga Serie A ( organismo que pertenece a la Federación), lo que impide al CONI realizar cambios de directivas en ese organismo.
Por esta razón, Malagó explicó que esperará hasta esa fecha y que, de no recibir los nombres de la nueva cúpula directiva de la Liga Serie A, convocará una Junta extraordinaria para elegir un nueva guía de ese organismo.
EFE