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Internacional

Al Zulia se le escapó en el último suspiro

Por Meridiano

Martes, 23 de mayo de 2017 a las 04:50 pm

Raúl Pérez / @enriul

Increíble. No existe otra palabra para describir lo que sucedió en la noche del martes en el estadio Arena Condá de Chapecó, recinto que acogió el duelo entre el sancionado Chapecoense y el Zulia de Daniel Farías, equipo que necesitaba por lo menos un empate para avanzar a la segunda fase de la Copa Sudamericana. Los venezolanos estuvieron al borde del triunfo, pero en menos de un minuto los locales se llevaron un triunfo que dejó a los zulianos con las manos vacías.

Chapecoense llegaba al duelo con la responsabilidad de obtener una victoria que limpiara la cara del club tras el bochornoso caso de la alineación indebida, por la que Conmebol le había restado tres puntos en la clasificación (arrancó la jornada con cuatro puntos, último en el grupo). Zulia, por su parte, viajó a Brasil con la posibilidad de hacer historia. Un empate les servía para seguir en competiciones internacionales (Sudamericana), ya que la Libertadores parecía estar muy lejos.

El duelo, aunque con dominio local, no pudo ponerse más de cara para los venezolanos. Pasada la media hora de la primera mitad, Sergio Unrein realizó una majestuosa jugada individual y Juan Arango solo tuvo que empujar la esférica para poner por delante a la visita. Arango, quien volvió a Venezuela con el sueño de disputar la copa Libertadores por primera vez, estaba marcando el gol del triunfo; triunfo que se le ha hecho esquivo a cualquier equipo venezolano en suelo brasileño desde hace 46 años.

Tras el descanso Zulia pudo aumentar la diferencia por intermedio de Yohandry Orozco, pero el arquero Jandrei, detuvo el disparo del marabino. Hubiese sido vital ese tanto. De ahí en adelante, los locales inclinaron definitivamente la cancha.

Una salava en la línea por parte de Plazas, la expulsión de Héctor Bello y un par de remates a los postes fueron avisos del nefasto desenlace para los venezolanos. Al minuto 90, tras varias llegadas claras, Arthur encontraría un rebote en el área para superar a Renny Vega e igualar las acciones. No pasaba nada, el empate le valía a Zulia para alcanzar u objetivo, pero Chapecoense no había dicho su última palabra.

El conjunto de Chapecó, empujado por la fuerza de sus fanáticos y con más corazón que ideas, recuperaron rápidamente el balón y Rossi terminó enviando un centro envenenado para que Andrei anticipara a la defensa marabina, venciendo a Renny Vega y decretando el 2-1 final.

Al final, Zulia vuelve a casa con las manos vacías, tras haberse entregado por completo sobre el terreno de juego, y con la incertidumbre de su devenir en el torneo local, a la espera de la decisión del Cómite de la FVF sobre su alineación indebida. Semana negra para los zulianos.

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