Raúl Pérez / @enriul
Tras los triunfos de Valencia, Atlético de Madrid y Real Madrid, en la presente jornada, Barcelona visitó a Villarreal en el estadio La Cerámica y no falló, derrotando a los valencianos con marcador de 0-2 y estirando, nuevamente, la ventaja a cinco puntos en el tope de la tabla.
Barcelona, con Denis Suárez en el frente de ataque, Paulinho en la medular y Thomas Vermaelen en la zaga, como variantes en su once, dominó el esférico desde el primer momento del compromiso, logrando dejar un porcentaje de posesión de 70% en la primera mitad.
Un cabezazo de Gerard Piqué, al minuto tres del compromiso, fue la oportunidad más clara para los dirigidos por Ernesto Valverde, quienes vieron como Marc-Andre ter Stegen se volvía a erigir como héroe, sacando una mano milagrosa ante el remate de Roberto Soriano.
La tenencia de balón azulgrana, a pesar de ser abrumadora, no tenía efectividad en los últimos metros de la cancha, por lo que Villarreal hacía mucho daño con cada uno de sus contragolpes.
Los dirigidos por Javier Calleja lograron llegar al descanso con igualdad en el marcador, planteando un partido serio y ordenado, sobre todo a nivel defensivo. Tras el descanso, el dominio territorial del Barcelona bajó un poco, el compromiso se volvió un poco más abierto y las ocasiones se suscitaron de lado y lado.
Sin embargo, al minuto 60, llegaría la acción que desniveló el compromiso. Tras una salida desde el fondo del conjunto catalán, el joven atacante del Villarreal, Raba, cometió una fuerte entrada sobre Sergio Busquets, ante la cual el colegiado de la contienda, Ricardo de Burgos Bengoetxea, no dudó en sacar la cartulina roja.
El estratega del Villarreal dio entrada a Rukavina, en lugar de Roberto Soriano, pero los dueños de casa no lograron sostener a un Barcelona con superioridad numérica y terminaron encajando el primer gol del compromiso al minuto 72.
Luego de una muy buena jugada entre Lionel Messi y Paco Alcácer, Luis Suárez recibió el balón dentro del área y superó con autoridad la salida de Sergio Asenjo, para anotar el primer gol del encuentro.
A pesar de la ventaja, Barcelona no dejó de sufrir y a punto estuvo de encajar el empate, luego de que Manu Trigueros empalmara un trallazo desde la frontal del área, pero la figura de ter Stegen volvió a salvar los muebles a los dirigidos por Valverde.
Al minuto 83, el Barcelona aprovechó un error grosero en la salida del balón por parte del Villarreal y Sergio Busquets terminó asistiendo a Lionel Messi, para que el argentino marcara a placer el segundo tanto de la contienda, para lograr definir las acciones.
Messi, líder goleador de la Liga, llegó a 14 tantos y el Barcelona a 39 unidades, estirando a cinco puntos su ventaja sobre Valencia y aguantando la presión de sus más cercanos seguidores.