Manuel Vargas | @MA_Vargas7
Una imagen que se está haciendo habitual en el Real Madrid en los últimos tiempos es la de sufrir de más en sus partidos, pero también se está viendo otra en la que un canterano (o varios) salen en los instantes finales para salvar al equipo.
Álvaro Morata es el protagonista de esa fotografía y el delantero del club lo demuestra en cada minuto que Zinedine Zidane le regala sobre el terreno de juego. El canterano es el más efectivo de la plantilla de cara puerta, en relación a los minutos que juega.
El delantero ha disputado un total de 571 minutos (429 en Liga y 142 en Champions) marcando cuatro goles, dos en el campeonato español (Celta y Athletic Bilbao) y dos en Champions League (Sporting Lisboa y Legia Varsovia). Además, resalta que tres de esos goles han venido cuando Morata salta al campo desde el banquillo y dos han servido para darle la victoria a los merengues.
Sporting y Athletic lo sufrieron
La primera gesta salvadora de Morata se vio en Champions ante el Sporting de Lisboa, cuando en el tiempo añadido aprovechó un buen centro de James Rodríguez para cabecear un balón a la red, confirmando la remontada blanca y dándole tres puntos clave al Madrid.
Morata se vistió de héroe nuevamente en Liga. Zidane le dio 15 minutos y le bastaron para marcar el 2-1 definitivo ante el Athletic Bilbao y que le da los blancos el liderato de la Liga, en solitario con 21 puntos, tras cumplirse nueve jornadas.
El atacante español es un revulsivo de lujo, pero cada vez que sale deja muestras que merece la titularidad, más aun viendo el rendimiento de Karim Benzema. El francés ha marcado la misma cantidad de goles que Morata (4), aunque los cuatro tantos han sido solo en Liga, pero su implicación e influencia en el juego son casi nulas, y viendo las muestras de esfuerzo que da el madridista, el galo queda muy mal parado.
La participación de la BBC es importante en el esquema de Zidane, pero Morata viene pujando fuerte. La afición y compañeros han entendido que el canterano merece la titularidad solo falta que el estratega francés lo entienda para que Morata termine de demostrar que merece mucho más tiempo de lo que ha jugado.