Ángel Darío Sánchez
La regularidad ha sido una palabra que en los últimos meses no ha salido de la mentalidad de Ronald Vargas, un jugador que ha pasado por el penoso mar de las lesiones que han inundado parte de su carrera desde que llegó al viejo continente. Pero en Turquía ha conseguido la fórmula para esquivar a los fantasmas de las lesiones y establecerse de nuevo, para retomar el nivel de juego de otrora.
Con el Balikesirpor turco ha ganado esa confianza que perdió por culpa de esos espectros de las lesiones, al punto que ya ha superado la barrera de los diez partidos jugados, algo que no hacía desde la temporada 2012/2013 cuando defendía los colores del Anderlecht en Bélgica.
Y este viernes volvió a sumar minutos con la camisa roja en el empate (2-2) frente el Akhisar Belediye, en la apertura de la jornada 18 de la Primera División del país euroasiático. Vargas fue titular y disputó todo el partido, para ya llegar a los 963 minutos jugados, lo que habla de la regularidad que ha tenido el criollo, que ya lleva tres goles en su cuenta.
“Ronita” en la parte personal vive un renacer pero en la parte grupal es la cara de la otra moneda; con el empate firmado, el mirandino y el Balikesirpor no pudieron abandonar el foso de la tabla, para seguir por otra jornada más en el infierno del descenso. Acumulan 13 puntos y se encuentran a dos de los puestos de la salvación (sus rivales directos tienen que disputar el resto de la jornada este fin de semana), por lo que el objetivo para las próximas fechas es no ceder más puntos para mantener la categoría.