Héctor Rojas
En el deporte mundial han existido maldiciones famosas que han durado a través de los años. En el beisbol se recuerda la del “Bambino”, capítulo que pudo cerrarse con la conquista de los Medias Rojas de Boston en 2004, o la de la “Cabra” la cual no le ha permitido a los Cachorros de Chicago ganar una Serie Mundial desde 1908.
En Argentina existe una corriente que considera que su selección no ha ganado nada importante desde que los campeones de 1986 incumplieron una promesa realizada a la Virgen de Copacabana del Abra de Punta Corral, en Tilcara, provincia de Jujuy (norte).
En esta localidad aseguran que los integrantes del plantel (quienes se preparaban allí por los 2.645 metros de altitud, similar a la Ciudad de México) prometieron que si ganaban la Copa volverían al pueblo.
Lo cierto es que se coronaron en México, pero, según la leyenda, los jugadores le fallaron a la Virgen. Carlos Salvador Bilardo, entrenador de ese equipo, indicó que él le preguntó a varios futbolistas si hicieron la promesa y ellos respondieron que no, pero dos de esos campeones del mundo, el volante cinco Sergio Batista y el defensor central José Luis Brown, visitaron a la virgen en el año 2011, esto con el fin de echar por tierra una supuesta “maldición”.