Manuel Vargas/@mnl7
Un verdadero viacrucis está viviendo el Real Madrid esta campaña con las lesiones. Las excusas de la temporada pasada se agotaron y todos los ojos, mayormente de los jugadores, apuntan a una sola persona: Jesús Olmo, jefe del departamento médico del club.
En esta campaña se contabilizan 26 lesiones musculares que al analizarlas dejan muy mal parados al departamento médico del club.
Varios medios españoles señalan que existe una “guerra” entre los servicios médicos del equipo y los integrantes de la plantilla blanca, que se remonta a la temporada pasada. Desde la llegada de Olmo al club en 2013, con beneplácito de Florentino Pérez, estuvo en desacuerdo con varios pesos pesados del club. La campaña pasada culpó del bajón físico, al final de temporada, al preparador físico de Ancelotti; este terminó siendo despedido junto con su staff técnico, pero no sería el último.
Siguen los despidos
Olmo ya había despedido a Pedro Chueca, quien era uno de los preparadores de confianza de muchos jugadores de la plantilla; antes de empezar la presente temporada, con los futbolistas de vacaciones, reestructuró completamente el cuerpo médico y ahora con las lesiones los jugadores prefieren tratarse fuera, con los antiguos fisios, que con la gente contratada.
Diagnósticos errados
Los malos diagnósticos y los tratamientos erróneos han colmado la paciencia de la plantilla, los últimos ejemplos son Cristiano Ronaldo y Benzema.
El portugués luego de que recayera de su lesión, transformándose en una microrrotura, además de que también sufrió una sobrecarga en su sóleo derecho, decidió tratarse con Joaquín Juan, fisio de confianza que ha tratado a otros como Pau Gasol, y no con los servicios del club; mientras que Benzema, harto también de lo mismo, está en las manos de Juan Muro, uno de los exfisios que Olmo despidió antes de iniciar esta campaña.
Otros casos similares ya se han venido dando desde que Olmo llegó al club en 2013: Modric, el propio Benzema; esta temporada Danilo, también decidió tratarse afuera. Con James Rodríguez se vio el caso de que por malos diagnósticos su regreso a las canchas se retrasó más de lo debido.
La mala pretemporada, unida a los fallos del cuerpo médico, se adhiere a las quejas que también señalan a Florentino Pérez como uno de los culpables de las cosas que no van bien en el club merengue. Lo cierto es que la plantilla no quiere saber nada de Olmo y los que integran los servicios médicos del club, algo que ya es evidente y que debe resolverse al final de esta temporada, independientemente de que el equipo gane algún título o no.
Viernes 29-04-2016