Manuel Vargas
La victoria se reencontró con el Real Madrid o se podría decir que los merengues la buscaron tanto que al fin la encontraron. Las dos derrotas en Liga, ante Sevilla y Barcelona, dan paso a un triunfo de 0-2 con poco brillo frente a un Eibar muy serio que se mantuvo hasta el segundo gol del partido.
El club blanco llega algo tocado, no solo por los últimos resultados, sino también por las bajas. El 11 de Benítez, volvió a cambiar con respecto al que jugó en la semana en Champions. James y Kroos volvieron, Danilo jugó por la izquierda y Kovacic entró para ayudar en la medular. Pero los cambios poco contribuyeron a mejorar al equipo, que sigue sin demostrar un juego acorde a sus nombres.
Al frente un buen Eibar, comandado por el japonés Inui dio guerra a un Madrid que no encontraba la forma de anotar. El gol vino de una jugada a balón parado luego de un córner en corto de Modric para James, que este devolvió al croata, el centro fue cabeceado por Bale que se reencontró con el gol, un amigo que no veía desde agosto.
Así se fue el primer tiempo en el que el Madrid no sufrió, pero tampoco se hizo dueño del partido. El resto del partido transcurrió de forma tranquila hasta la entrada de Lucas Vázquez. El canterano ingresó por un James inoperante, que la derecha desaparece y no ayuda, pero Vázquez es un pez en el agua por esa banda.
Una jugada del ex del Espanyol acabó en el penal que transformó Cristiano Ronaldo. El portugués ofuscado y envuelto en peleas con sus fantasmas y el árbitro no había podido marcar diferencias en el partido. Sus goles son importantes y que vayan llegando son una buena noticia para el equipo y para Benítez.
Al final, el Madrid se va de Ipurúa con tres puntos y una nueva lesión. Carvajal salió del partido tras sufrir unas molestias y para los próximos partidos el técnico tendrá que pensarlo bien, sin descartar un exorcismo, para proteger a los defensas que le quedan.
El Barcelona y el Atlético de Madrid están delante, pero el Madrid sabe que en la Liga aún no se ha dicho la última palabra.
Domingo 29-11-2015