El subgerente de los Astros de Houston se disculpó el martes por emplear "lenguaje inapropiado", luego que un artículo de Sports Illustrated informó que el ejecutivo hizo a gritos varios comentarios hacia un grupo de reporteras, en referencia al cerrador Roberto Osuna, durante una celebración en el clubhouse.
Brandon Taubman emitió un comunicado mediante la organización de los Astros, horas antes de que disputaran el primer juego de la Serie Mundial ante los Nacionales de Washington. La oficina de las Grandes Ligas informó que entrevistará a los involucrados antes de pronunciarse sobre este asunto.
En momentos en que los Astros festejaban la obtención del título de la Liga Americana y el boleto a la Serie Mundial, Taubman habría hecho los comentarios sobre Osuna, quien fue suspendido 75 juegos el año pasado por infringir la política de las mayores sobre violencia doméstica. Después del escándalo, el taponero mexicano fue cedido por los Azulejos de Toronto a los Astros.
De acuerdo con la publicación, Taubman gritó: "¡Gracias a Dios tenemos a Osuna!", y arengas similares, en las que intercaló una palabra malsonante.
Sports Illustrated añadió que una de las reporteras a quienes Taubman dirigió los gritos usaba un brazalete emblemático de la lucha contra la violencia doméstica. Los hechos ocurrieron el sábado por la noche, después de que Houston derrotó a los Yanquis de Nueva York en el Minute Maid Park, para llevarse el sexto juego de la Serie de Campeonato de la Americana.
El lunes por la noche, tras la publicación del artículo, los Astros consideraron que su contenido era "engañoso y absolutamente irresponsable". Añadieron que Sports Illustrated había tratado de "fabricar una historia donde no la había", y negaron que Taubman hubiera dirigido sus comentarios a las reporteras.
Pero este martes, Taubman afirmó que estaba "profundamente arrepentido y avergonzado".
"En retrospectiva, me percato de que mis comentarios fueron antiprofesionales e inapropiados. Mi apoyo exagerado a un pelotero ha sido malinterpretado como una manifestación de una actitud regresiva sobre un asunto social importante", indicó.
En un comunicado, las Grandes Ligas destacaron que "todos en el béisbol deben tener cuidado de no involucrarse en alguna conducta _intencional o no_ que pueda interpretarse como algo que minimiza la gravedad de un acto de violencia doméstica".
"Los Astros han rechazado la descripción del incidente dada por Sports illustrated. Las Grandes Ligas entrevistarán a los involucrados antes de emitir más comentarios", añade el comunicado.
El manager de Houston, AJ Hinch, dijo el martes que no estaba al tanto de lo ocurrido sino hasta que se publicó el artículo. Comentó que no había hablado con todos los involucrados, pero recalcó: "Todos debemos estar en una mejor sintonía en la industria", cuando se trata de asuntos como éste.
"Estoy muy decepcionado por varias razones”, expresó. “Es desafortunado. Algo que no se buscaba. Como líder de esta organización aquí en el cluhouse y en el terreno, asumo de corazón la responsabilidad por lo que pasa en el clubhouse. Nadie, no importa si es un pelotero, un coach, un manager o alguno de ustedes, miembros de la prensa, debería sentir jamás que está incómodo o le faltan al respeto cuando entra en este clubhouse”.
Los fiscales canadienses desecharon en septiembre de 2018 un cargo de violencia doméstica contra Osuna, quien accedió a alejarse de la presunta víctima durante un año y a continuar una terapia. La fiscalía señaló que la mujer, quien residía en México, había dejado claro que no viajaría a Toronto para testificar contra Osuna.
El lanzador fue acusado de agresión en mayo de 2018. Los Azulejos lo cedieron en canje a Houston dos meses después.
Jim Crane, el dueño de los Astros, emitió un comunicado en el que dijo que el club obliga a que sus empleados lleven sesiones de entrenamiento para mantener una buena conducta.
“Respaldamos completamente la postura de las Grandes Ligas y del béisbol en lo que respecta a la violencia doméstica”, agregó.
También el martes, la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica se dijo “alarmada y consternada por los actos” del equipo y de su departamento de relaciones públicas. En un comunicado, consideró que la negativa del incidente por parte del club fue “una invención antiética e intencional, diseñada para desacreditar a nuestros miembros y periodistas”. / AP