La decisión que le dio la victoria a Floyd Mayweather, a pesar de generar muchas reacciones en redes sociales, fue bastante uniforme y acertada, según demuestran los numeritos de la misma.
Los jueces de la “Pelea del Siglo” solo difirieron en un par de episodios de los doce peleados. Específicamente, las diferencias se presentaron en los rounds noveno y décimo.
El juez Dave Moretti le dio ambos rounds a Mayweather, apuntando 118-110; mientras que los jueces Clements y Glenn Feldman apuntaron estos rounds a Pacquiao y dictaminaron que el resultado fue 116-112.
A pesar de esta divergencia, ninguno de los encargados de la decisión final vio que la pelea fuese para Pacquiao.
Las estadísticas de la pelea parecen confirmar la decisión de los jueces.
Pacquiao conectó sólo el 19% de los golpes que lanzó (81 de 429) apenas 27% de los golpes de potencia. Su jab casi nunca acertó en el blanco, sólo 9% fueron registrados como acertados.
Mayweather, por su parte, fue menos activo pero mucho más preciso: 34% de sus golpes llegaron a su objetivo (148 de 435) y 25% de sus jabs se estrellaron contra el cuerpo de su oponente (67 de 267). El campeón también tuvo un porcentaje mayor de “power shots” acertados, con 48% registrados (81 de 168).
A pesar de estos números, Pacquiao llegó a afirmar que su oponente nunca lo maltrató. “Lo golpeé más de lo que me pegó a mí”, llegó a declarar el filipino.
Sin embargo, Mayweather afirmó que su oponente nunca descifró su jab ni su gancho de derecha.