Manuel García Velázquez || @ManuelGarciaVe || Barquisimeto
Juniel Querecuto no baja la guardia y piensa que el cambio de sede de Barquisimeto al estadio Alfonso “Chico” Carrasquel no significa un reto diferente en la final frente a Caribes de Anzoátegui. El campocorto también consideró que la serie está muy pareja porque los orientales han hecho un buen ajuste con sus lanzadores, sin embargo piensa que con las indicaciones del coach de bateo Selwyn Langaigne, el equipo puede seguir respondiendo con el madero.
Cardenales de Lara conectó en el primer encuentro 10 imparables y ligó para promedio al bate de .286. Pero tan solo pudieron dar par de indiscutibles en 10 oportunidades con hombres en posición anotadora. El infielder aseguró que no tener paciencia fue clave en ese choque inicial: “Nosotros comenzamos siendo muy agresivos y eso es lo que siempre queremos, sin embargo nos faltó un poco esperar nuestro lanzamientos para poder ser más certeros con corredores en situación de anotar. Caribes han mejorado su pitcheo y esos es mérito para ellos, ahora nosotros tenemos que platear frente a esa situación con los escenarios que nos plateó el coach Langaigne”.
“Salimos a ganar todos los encuentros no nos vamos a rendir en una situación donde está en juego el campeonato que todos deseamos. Jugar en Puerto La Cruz es igual que en todos los estadios solo cambia que allá todo es sintético, pero la serie todavía está muy pareja y buscaremos obtener los resultados de visitante”, afirmó Querecuto.
Sumando la participación de Querecuto en la final pasada y el primer encuentro de la justa final frente a la tribu, el campocorto tiene tres indiscutibles en 24 turnos al bate si carreras remolcadas y tres anotadas: “Estoy consciente que es una situación negativa, pero los ajustes ya los hicimos durante toda la temporada. Ahora solo me toca ver los resultados sumado a la experiencia que tengo en este momento. No quiero presionarme en ninguna situación nosotros no podemos dejar de pensar en ganar así que seguimos pensando en el mismo rumbo que es el título”.
“Estamos contentos de estar en una final tengo mucho entusiasmo de participar y estar con salud en esta instancia. Pero no podemos de dejar de jugar la pelota como lo hemos venido haciendo solo porque tuvimos un revés la campaña pasada y esta final la comenzamos abajo. Luchamos mucho para llegar aquí como para rendirnos”, dijo el infielder.
Querecuto es oriundo de Bobare, municipio Iribarren del estado Lara, igual que Luis Jiménez, quien jugó 13 temporadas con los crepusculares y ahora es el bateador designado de Caribes, pero el parador en corto quiere que el título este en su vitrina: “Es especial la rivalidad que tenemos por ser del mismo sector. Es bueno porque asegura que el campeonato esté en Bobare, pero yo quiero que este en mi familia”.