Adio Arroyo Jiménez / Barquisimeto
Henry Urrutia llegó hace poco más de un mes a Barquisimeto con la misión personal de demostrar con los Cardenales de Lara que las condiciones y el nivel de su juego que mostró en su pasantía por las Grandes Ligas estaban intactos, luego de recibir pocas oportunidades durante 2017 en la pelota organizada con las organizaciones de Orioles de Baltimore y Medias Rojas de Boston.
Con dos años de experiencia con Leones del Caracas y esta su tercera experiencia en el país y primera con Lara, Urrutia se consolidó durante el primer mes de acción dentro de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, como uno de los puntales en el ataque crepuscular. Parte de ese buen rendimiento se ha basado en su trabajo para mantener el enfoque.
“He trabajado, no desde ahora, sino desde Estados Unidos, donde inicié una rutina de bateo y la he continuado aquí en Venezuela”, destacó el cubano, quien ve positivo su accionar con la tropa dirigida por José Moreno. “Si quiero ser buen pelotero, debo trabajar para lograrlo, y hasta ahora he cumplido, pero siento que puedo dar más de mí y más para el equipo”, destacó.
El antillano no oculta su deseo de mejorar sus números en cuanto a remolcadas se refiere. “Siento que puedo enviar más compañeros al plato”, ratificó el espigado paleador, quien además reconoce que puede mejorar más en el tema de los cuadrangulares, ya que hasta los momentos no suma estacazos de vuelta entera en la temporada.
“Quiero buscar más jonrones”, declaró Urrutia, “Gracias a Dios he podido darle fuerte a la pelota, solo me falta levantar un poco más, los extrabases han comenzado a salir de manera más seguida”.
El pelotero presentó durante octubre una ofensiva destacable, al mantener una racha de 13 partidos consecutivos conectando imparables.
De igual forma agradece mucho al cuerpo técnico por estar pendiente de su rutina, de lo que hace en el terreno, no solo en el ataque, sino también en la defensa, que ha sido bastante regular cubriendo el jardín derecho de los alados.
En lo que va de torneo, el isleño tiene promedio de .353 en 25 partidos defendiendo la camiseta de Cardenales. Durante ese periodo, su línea ofensiva se traduce en 30 imparables, ocho dobles, un triple, 13 impulsadas y 17 carreras anotadas en 85 turnos oficiales. Además suma a 15 bases por bolas, lo que le mantiene activo en las bases.