María Isabel Moya | @MarisabelMoya
Los maderos se encendieron dentro del cardumen de La Guaira. La llegada de José “Cafecito” Martínez y José Gil marcaron un antes y después. Hasta ahora, la novena escuala ostenta una semana perfecta, sin derrotas.
Pero, no todo siempre fue color rosa. Durante los ocho primeros juegos de la temporada, los Tiburones de La Guaira obtuvieron un récord de seis juegos perdidos y tan solo dos ganados. Una crisis que hizo temblar a la escuadra de Oswaldo Guillén.
El experimentado José “El Hacha” Castillo (.375), el importado Brock Stassi (.351) el novato Omar Carrizales (.283) y el oportuno Alberto González (.240), son los nombres de quienes estaban dando la cara por la toletería del equipo. Ahora con la incorporación de “Cafecito”, que está viviendo el mejor momento de su carrera al ascender el pasado 6 de septiembre a Grandes Ligas y en 16 turnos conseguir siete imparables, entre ellos un doble, para dejar un promedio de .438 con los Cardenales de San Luis, llegó para complementar la ofensiva de Tiburones, siendo protagonista en la reciente victoria ante Leones del Caracas en su debut en la temporada.
Por su parte, José Gil lideró el jueves la lluvia de carreras propinadas a Caribes de Anzoátegui en el Alfonso “Chico” Carrasquel de Puerto la Cruz (15-4), al conectar un cuadrangular y anotar cuatro carreras para los litoralenses.
Ahora, en esta inminente recuperación, aunque todavía con un récord negativo de 5-6, La Guaira perderá a su guía. El mánager Oswaldo Guillén se despedirá del equipo escualo durante la Serie Mundial de las Grandes Ligas por compromisos con la televisora ESPN.
Guillén, único mánager latino en ganar una Serie Mundial, este domingo tras el partido ante Bravos de Margarita en el Universitario, dejará el equipo en su mejor momento hasta ahora, pero en manos de jugadores de peso dentro de la divisa, que tendrán la tarea de mantener la racha. ¿Lo lograrán?