César Sequera Ramos || @CesarSequera11
Desde 2011 enfrentarse a los Astros de Houston no es una buena noticia para los lanzadores de las Grandes Ligas. En especial por José Altuve, que a pesar de no tener la estatura de un toletero que genere pánico en sus rivales, su talento ofensivo genera pesadilla en sus rivales.
Sus tres zafras consecutivas superando los 200 inatrapables, dos temporadas con el promedio más alto en la Liga Americana y el trío de Bates de Plata conseguidos en su joven carrera, son algunas razones que no hacen atractivo medirse al aragüeño.
Pero al ser el máximo nivel, los lanzadores aceptan el reto y buscan distintas formas para dominar a Altuve. Por ejemplo, en 2014 intentaban sacarlo de circulación con velocidad, mientras que en 2016 trataron retirarlo con curvas; ninguna dio resultado.
Para 2017 siguieron experimentado y la fórmula es clara: lanzarle menos rectas a José Altuve. “Me doy cuenta que he visto más lanzamientos quebrados”, aseguró el camarero al Houston Chronicle sobre un presentimiento que las estadísticas confirman. Solo el 48.5% de los envíos que ve el criollo son rectas, una cifra que además de ser la baja más baja en su carrera, es otra prueba de los intentos que hacen los rivales para frenar su producción.
Este nuevo ensayo tampoco ha conseguido resultados positivos para los serpentineros. Altuve liga para .338 contra el slider, un impresionante .353 cuando le lanzan curvas y .429 contra la recta de dedos separados. “Como jugador tienes que hacer ajustes”, agregó el habilidoso bateador con una pasmosa tranquilidad.
Tampoco frenó su rendimiento o disminuyó su producción con el madero. José Altuve ya suma 110 inatrapables antes de la pausa del Juego de las Estrellas, ubicándose en perfecta posición para hilvanar su cuarto año consecutivo con más de 200 hits y quedando en perfecta posición para luchar por otro título de bateo.
Más envíos malos, más boletos
Lejos de caer en la desesperación por no tener tantos lanzamientos planos en la zona, Altuve está aprovechando este plan de los rivales para seguir desarrollándose como jugador. Manteniendo su agresividad, pero mejorando su disciplina, ahora es un mejor bateador.
Altuve ahora negocia bases por bola el 9.5% de las oportunidades, un número que contrasta del 8.4 que consiguió en 2016 y el 4.8% en la campaña de 2015. Eso ha llevado que su OBP supere los .400 y compita directamente con toleteros temidos como Aaron Judge o Carlos Correa.
Eso le permite proyectar 66 pasaportes negociados en la temporada, 6 más que su tope personal conseguido en 2016. “Al final del día, estás llegando a base”, agregó el criollo. “Estoy en camino a quebrar mi récord y lo puedo hacer porque estoy viendo más lanzamientos quebrados. Así que si lo siguen haciendo, lo tomaré”, concluyó Altuve.