Manuel García Velázquez / @ManuelGarciaVe
La salida del pasado lunes de Aníbal Sánchez tiene una connotación mucho más importante que una buena apertura. Los Tigres de Detroit, que pueden entrar en proceso de reestructuración pronto, no tienen mucho margen de maniobra en la actual campaña. El mánager Brad Ausmus entiende que cada apertura de sus lanzadores es vital para ganar encuentros. El venezolano, quien aceptó ir a triple A para tener una oportunidad como iniciador, reconoció que fue clave ir a las menores.
“A veces hay que refrescar muchas cosas y eso es lo que hice en mi tiempo en las ligas menores. Descubrir cómo puedo volver y tener éxito aquí en el equipo grande. Solo agradezco a Dios que estoy sano y puedo trabajar en algo y que puedo estar aquí y mostrar que soy capaz de lanzar a este nivel”, afirmó el derecho a la prensa norteamericana, luego de lanzar 5.0 innings y permitir un par de carreras limpias.
Ausmus señaló antes de la primera apertura de Sánchez en 2017 que fue necesario ir a las menores para hacer los ajustes y ahora siente que el criollo ya está listo para asumir un rol en la rotación.
“Es totalmente diferente cuando estás en una rutina que cuando tienes que relevar encuentros”, apuntó Sánchez, quien comenzó los campos de entrenamiento con la posibilidad de ser el quinto abridor de la rotación de los Tigres, pero perdió la batalla con Matt Boyd.
Los bengalíes tienen la segunda nómina más alta de las Grandes Ligas y Sánchez tiene el quinto sueldo más alto de la organización. Detroit puede realizar cambios antes de la fecha límite para las transacciones en 2017.