Pedro Felipe Hernández / [email protected]
Tener a José Altuve, campeón bate de la Liga Americana de la pasada campaña, permite a los Astros de Houston contar con un plus para imponerse sobre sus rivales. Y si saben combinar la ventaja con buen pitcheo, sin dudas la conferencia del Oeste estará plagada de estrellas para esta nueva zafra del mejor beisbol del mundo.
El 2016 no fue para nada un curso malo para los siderales, pero quedar de terceros con récord positivo ante Rangers de Texas y Marineros de Seattle opacó cualquier vestigio de brillantez. Haber aprendido de los errores del pasado podría ser el impulso que necesite este conjunto integrado en su mayoría por jóvenes promesas.
Altuve es sin dudas la figura de más peso en el dugout dirigido por A.J. Hinch. El camarero fue una máquina de batear en 2016. Sus 216 indiscutibles, 24 jonrones, 96 empujadas y .338 promedio de bateo hicieron del maracayero la pesadilla de los lanzadores en el nuevo circuito.
El error de los Astros en 2016 fue depender solo del criollo y es que el monarca del bateo en la Americana fue el único pelotero de la novena con promedio mayor a .300, y un equipo necesita el trabajo de todos para salir adelante.
Carlos Correa mostró en el reciente Clásico Mundial de Beisbol que tiene las habilidades para convertirse en un toletero de poder y agilidad para romper las serpentinas que le lancen.
La unión del campocorto boricua con el segunda base venezolano la convierte en una de las duplas más mortíferas de la Gran Carpa en la actualidad. De su desempeño dependerá el ritmo que tome el equipo.
Veteranos que ayudarán. Es cierto que el equipo de Houston sufrió bajas importantes durante la campaña pasada y en la temporada muerta, pero ahora contará con la experiencia de jugadores que saben muy bien cómo ganar y cómo enseñar a la generación de relevo: Carlos Beltrán y Brian McCann, que con sus 39 y 33 años de edad, respectivamente, firmaron cada uno por un año y pueden demostrar que aún tienen para llevar a un equipo al campeonato.
Beltrán comenzó 2016 con los Yanquis de Nueva York. En la fecha de cambios del 31 de julio llegó a los Rangers de Texas, que se quedaron a medio camino de los playoffs. El puertorriqueño regresa con más rodaje al equipo al que perteneció en 2008.
Tras la salida de Jason Castro todo queda en el guante de Brian McCann, quien por tres zafras continuas defendió el uniforme de rayas del Bronx.
Las apuestas siguen en Keuchel. El as de la rotación sigue siendo el zurdo ganador del Cy Young de la Liga Americana en 2015, Dallas Keuchel. A pesar de que 2016 no fue un gran año para el siniestro, pues sufrió 12 reveses en las 26 oportunidades que abrió, cuenta con otra oportunidad de reivindicarse y demostrar a todos que su 2015 no fue un golpe de suerte.