César Sequera Ramos || @CSequera11
Gerardo Parra siempre ha tenido el mote de “especialista defensivo” en las Grandes Ligas. Su amplia capacidad para cubrir terreno en los jardines, instintos para jugar y su potente brazo, ya le permitieron conseguir dos Guante de Oro (2011 y 2013) en el mejor beisbol del mundo.
Esas condiciones le permitieron conseguir un contrato de tres años, a cambio de 27.5 millones de dólares con unos Rockies de Colorado, que teniendo tantos problemas en su cuerpo de lanzadores, esperaban que su estelar defensiva ayudara a conseguir mejor resultados.
Pero su primer año en Denver pasó todo lo contrario. Gerardo Parra, que solamente jugó 102 encuentros -79 en los jardines-, tuvo un bajón considerable en sus estadísticas defensivas y no fue un factor que ayudara a su equipo.
En 2015, su alcance fue medido en 2.03, mientras que el año pasado cayó a 1.76. Hace dos campañas, cuando jugó con Cerveceros de Milwaukee y Orioles de Baltimore, dejó su WAR defensivo en -0.8, pero en su primera campaña con Colorado descendió hasta -1.6.
Gerardo Parra niega que ese bajón solo fuera por problemas físicos, pero lo que sí está seguro, es que en 2017 volverá a ser una amenaza con el guante. “La lesión no lo fue todo. Sería muy fácil decir que solo se trató de eso”, comentó Parra. “Lo que sí puedo asegurar, es que esas estadísticas van para arriba. Van a subir como la espuma”.
Luego de un exhaustivo trabajo físico con especialistas, Gerardo Parra asegura que se encuentra completamente saludable, su principal razón para ver con ojos de optimismo la próxima temporada. “La campaña me molestaba el tobillo cuando debía buscar la pelota, pero eso es cosa del pasado”, contó el jardinero de Colorado. “Ya no estoy pensando del año pasado, sino lo que haré en éste”, aseveró.
“No voy a jugar primera base”
Con la misma seguridad que volverá a ser un candidato al Guante de Oro, Gerardo Parra reitera que no experimentará más en la primera base. Con la irrupción de David Dahl, la lesión del zuliano y el enorme talento que había en los jardines, los Rockies de Colorado decidieron usarlo en la inicial, algo que no sucederá más.
“Cuando terminó la temporada, tuve una conversación con el gerente general y le dije que estaba jugando allí porque no podía correr”, comentó Parra. “Pero le dije que no iba a jugar más en la primera base y que si quería hacer algo conmigo, que estaba bien, pero ahí (inicial) no voy a estar”.
No es su habitad natural, no le gusta ni le interesa. Gerardo Parra tiene la convicción que puede rendir mejor en los jardines, algo que lo ayudará a recuperar confianza y llevar a los Rockies a una mejor posición.
“Esa es mi posición natural y no voy a estar en un lugar donde no puedo dar el 100%”, declaró Parra. “Ya queda la decisión del mánager en cuál de los tres lugares que me quieran usar”, concluyó.