NOTAS RELACIONADAS
Por: Pedro Ricardo Maio
Miami (especial).- La Serie del Caribe bajó el telón, quedando la nostalgia de nueve días intensos y en donde Tiburones de La Guaira rompió otro “maleficio” de 15 años sin títulos para Venezuela.
Más allá de las hazañas individuales, el equipo venezolano mostró mucha cohesión y armonía en el club house, además del carácter competitivo que les permitió ganar 7 de 8 juegos.
Ricardo Pinto estaba tocado por los dioses del béisbol. En la planificación original Jhoulys Chacín era la elección para abrir la final, pero su molestia durante el calentamiento dominical le impidió lanzar.
“A veces las cosas no salen como los planeamos, pero lo importante es que tuvimos un gran equipo y contamos con las soluciones” apuntó Carlos Zambrano, coach de pitcheo.
Ricardo Pinto sólo tenía tres días de descanso, pero sabía que esta oportunidad no la podía dejar pasar. “Gracias a Dios nunca sentí cansancio, solo ya el sexto inning, controlé las emociones y todos mis pitcheos estaban cayendo en strike. La adrenalina que sentíamos, ante tanto público, fue increíble, única” destacó quien entre la final y la Serie del Caribe, apenas permitió 1 carrera en los últimos 24.2 innings.
La Guaira armó uno de los mejores staff de relevista y, con un abridor capas de ir 5 tramos, lo victoria estaba casi garantizada.
“No le puedo pedir más nada esta temporada. Haber lanzador en el último juego de la final, ser parte de esta historia con el título para Venezuela no se compara con nada. Este grupo de aficionados se lo merecían, los apoyaron siempre y este regalo es para ellos” manifestó Arnaldo Hernández, taponero de Tiburones.
Los refuerzos cumplieron con su rol. Ramón Flores destacó por sus batazos oportunos, una producción superlativa ante los brazos zurdos y su defensa también ganó juegos.
"Esta serie del Caribe fue muy especial. Fue algo mágico, le doy las gracias a Tiburones de La Guaira por haberme tomado en cuenta y di lo mejor para levite este trofeo” comentó el refuerzo tomando de Bravos de Margarita.
Hernán Pérez jugó una tercera base extraordinaria y mostró intensidad en cada acción, desplazándose en las bases con velocidad, en búsqueda de una base adicional.
“Vinimos a llevarnos el campeonato y teníamos que jugar fuerte. Todos estábamos comprometidos, veníamos cada día al estadio con la mejor actitud y cuando veías a este público no había excusa para no dar el máximo. Hoy somos Campeones del Caribe" dijo quien apareció estrellas como primera base.
Yasiel Puig jugó con molestias en la rodilla, pero siempre se entregó en el terreno de juego. Tuvo que salir temprano en el juego final, pero disfrutó cada momento de su estadía con Tiburones.
“Este es un momento único, me siento muy feliz por darle este título a Venezuela” dijo el cubano.
La historia que construyó Tiburones,durante la temporada 2023-24, es única, irrepetible.