Respaldada por un buen trabajo monticular, República Dominicana se impuso el lunes 3-1 a Puerto Rico al arrancar la Serie del Caribe de béisbol en Panamá.
El partido representó el regreso de la serie a Panamá después de seis décadas. El país centroamericano albergó el torneo como medida de emergencia después de que le fue retirada la sede a Venezuela debido al repunte de la crisis política que vive.
Néstor Cortés lanzó cinco episodios, en los que solo admitió una carrera y un imparable, para guiar a las Estrellas Orientales a una victoria sobre los Cangrejeros de Santurce en el estadio Rod Carew. Cortés, que ponchó a cuatro y se apuntó la victoria, fue respaldado por un relevo que no permitió carreras. José Rafael Díaz sacó los tres últimos outs para llevarse el salvamento.
Jonathan Sánchez cargó con el revés.
Dominicana pegó primero al anotar su carrera inicial en la parte alta del segundo con un imparable de Alfredo Reyes, que trajo al plato a Diego Goris.
Después de maniatar a la batería boricua, Cortés se tambaleó en la parte baja del cuarto inning al dar dos bases por bolas y permitir la carrera del empate, remolcada por el designado David Vidal. Dominicana sumó la segunda en la parte alta de la quinta, en un episodio en el que llenó las bases. La tercera la fabricó en el noveno.
Los dominicanos conectaron 13 imparables frente a uno de los puertorriqueños.
A continuación se medían México y Venezuela. El panameño Mariano Rivera, quien hace dos semanas se convirtió en el primer jugador en la historia de las Grandes Ligas en ser elegido al Salón de la Fama con votación unánime, haría el lanzamiento de honor. // AP