Diego Naranjo Cevallos
El 25 de noviembre de 1985 es una fecha que perdurará en la memoria de Oswaldo Guillén. Ese día, la Asociación de Cronistas de Beisbol de Estados Unidos anunció que el campocorto de las Medias Blancas de Chicago fue el ganador del premio a Novato del Año de la Liga Americana con tan solo 21 años de edad. De esta manera Guillén se convirtió en el segundo venezolano en alzar el galardón tras lo hecho por Luis Aparicio en 1956 con los mismos patiblancos.
“El Novato del Año fue algo de más orgullo para mí que ganar la Serie Mundial”, comentó el expiloto de las Medias Blancas que se proclamaron campeones de las Grandes Ligas en 2005. “Cuando tú eres mánager siempre tienes la oportunidad de ser campeón de la Serie Mundial, pero solo tienes una sola oportunidad para ser Novato del Año”, analizó, vía telefónica, el nacido en Ocumare del Tuy.
Previo al inicio de la campaña de 1985, los patiblancos realizaron un cambio en el que enviaron al ganador del Cy Young de 1983, LaMarr Hoyt, a los Padres de San Diego por cuatro peloteros, donde destacaban los criollos Luis Salazar y el joven Guillén. Tal transacción no fue muy bien recibida entre los fanáticos de la ciudad de los vientos, pero el propio campocorto se encargó de hacer olvidar la negociación y se convirtió en el mejor novato de su liga, tras batear para .273, anotar 71 carreras y remolcar 33 anotaciones. Además, disparó 21 dobles y nueve triples. A la defensiva cometió 12 errores y terminó con un porcentaje de fildeo de .980.
Guillén le ganó en la votación al lanzador Teddy Higuera, quien era ficha de los Cerveceros de Milwaukee, novena que transitó en el joven circuito hasta la temporada de 1997. El criollo consiguió 16 de los 28 votos posibles para sumar 101 puntos, mientras que Higuera consiguió 67 unidades.
“Cuando ganas esa clase de premio se te abren muchas puertas en Grandes Ligas”, recordó el ahora comentarista de la cadena deportiva ESPN, quien participó en tres Juego de Estrellas (1988, 1990 y 1991) y ganó un Guante de Oro en 1990.
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