César Sequera /@CasR11
Más allá que Carlos Carrasco ponchó a 13, consiguió la victoria 10, mantuvo su gran momento individual y que igualó el primer puesto en ganados de la Liga Americana, todas las preguntas al serpentinero se centraron en el momento que Joey Butler le conectó sencillo para terminar con el “no hitter” en el noveno episodio con dos outs.
El barquisimetano aseguró que entendía lo que estaba sucediendo en su entorno y esa emoción era bastante palpable en el terreno de juego. "Me sentí muy bien", dijo el serpentinero a los distintos medios internacionales. "Tenía todos los fans gritando. Eso me hizo sentir bien."
Es por eso que Carrasco quería terminar su hazaña a lo grande, y quizás eso fue lo que terminó jugándole en contra. “Quería poncharlo”, sentenció el abridor cuando se le preguntó por el turno final. “Comencé a pensar que iba a hacer, si iba a lanzar el guante al aire, o algo así”.
Pero esa celebración no estaba en la mentalidad de Butler que conectó un sencillo y terminó toda la adrenalina que corría por las venas del venezolano. “Solamente comencé a reirme”, informó el larense que utilizó esa reacción al momento que observaba que se terminaba su “no hit no run”.
La clave: Los lanzamientos quebrados
Es bien conocido que para lograr una hazaña de tal magnitud, más que todo se necesita levantarse con algo más de inspiración, sin embargo, desde el punto de vista técnico, los lanzamientos quebrados de Carrasco fueron fundamentales en su joya.
El instructor de lanzador de los Indios, Mickey Callaway, resaltó el comportamiento de sus envíos secundarios. “Estaba moviendo la pelota bastante bien”, senteció el coach. “Incluso en el bullpen su slider y la curva eran bastante buenos. Esa fue su principal arma”, conlcuyó.
Jueves 2015-07-02