El ex gerente general de los Golden State Warriors, Bob Myers, ha declarado que el equipo no ha logrado identificar a la persona responsable de filtrar el video en el que se ve a Draymond Green golpeando a Jordan Poole durante una pelea en la práctica del equipo. Myers enfatizó que el equipo está tomando "todas las medidas legales" para descubrir cómo se hizo público el video, y que tanto Green como Poole se disculparon con el equipo por el incidente. Además, se espera que el club maneje cualquier suspensión o castigo internamente, sin que Green se pierda partidos como consecuencia del altercado
NOTAS RELACIONADAS
Un conflicto viral en redes sociales
La filtración del video ha generado un escándalo en la NBA, con los medios estadounidenses informando que la franquicia de San Francisco ha abierto una investigación al respecto para llegar al fondo del problema. Se ha confirmado que Green se disculpó con el equipo y que Poole estuvo presente en la cancha después del incidente.
A pesar de la gravedad del altercado, Myers ha minimizado la pelea, señalando que "estas cosas suceden" y que el equipo no aprueba este tipo de comportamiento, pero reconociendo que es parte del deporte profesional
El incidente, que tuvo lugar durante una práctica cerrada a los medios, ha generado tensión entre los jugadores y ha dejado al ala-pívot Poole a la espera de una posible sanción del equipo. A pesar de la gravedad de la situación, se cree que Poole no sufrió lesiones de consideración, ya que continuó practicando y lanzando tiros en la cancha.
El video del incidente, que se atribuye al personal encargado de la edición de video, fue publicado por el portal TMZ.com, mostrando la violenta agresión de Green a su compañero de equipo
El escándalo ha generado incomodidad en el equipo y la franquicia, con Green expresando su malestar por la situación y pidiendo disculpas a Poole, su familia y amigos.
La filtración del video ha afectado a ambos jugadores y ha generado un ambiente tenso en el equipo, con la familia de Poole viendo el video y experimentando una sensación de incomodidad. Green ha reconocido que el incidente le incomoda y afecta, y ha pedido disculpas a la familia de Poole por la situación