Lyss Cedeño||@lyssCede
Jaylen Brown, alero de Boston Celtics realizó un mate y aterrizó sobre su cuello tras descolgarse de la canasta.
La mala caída de Brown le dejó unos instantes tendido en el suelo y congeló el estadio en el que los Celtics se medían con los Timberwolves de Minnesota.
Brown corrió al aro después de robar el balón y lo clavó mientras el lanzador de los Timberwolves, Andrew Wiggins, lo marcaba con 1:31 restantes en el tercero. Brown pareció caer sobre su cabeza cuando el personal médico de ambos equipos corrió a controlarlo por debajo del borde.
Después de unos momentos, una camilla fue llevada a la duela mientras el silencio se cernía sobre la multitud del Target Center. Los jugadores y entrenadores de ambos equipos observaron con expresiones nerviosas mientras el personal continuaba revisando a Brown.
Después de un par de minutos, Brown se sentó y luego caminó de regreso al vestuario por su propia cuenta, mientras los fanáticos lo ovacionaban de pie.
El estadounidense tendrá que ser sometido a distintas pruebas para medir el alcance de la conmoción, pero él mismo se ha encargado de tranquilizar a través de las redes sociales a la afición de la NBA, que se quedó helada tras su caída, e incluso bromeó sobre la situación.
"Gracias a todos. Estoy bien, aunque me duele la cabeza. Contento de que el equipo ganara", publicó Brown.