La temporada anterior (2016-2017) para Joakim Noah fue la peor desde que llegó a la NBA. El pívot con triple nacionalidad firmó con Knicks de Nueva York en el verano de 2016 un contrato de cuatro temporadas a cambio de 72 millones de dólares. Sin embargo, por sus pobres actuaciones, hoy se le considera uno de los peores contratos en toda la liga pero ahora quiere redimirse en la capital del mundo.
Noah no disputa ningún partido de la NBA con su franquicia desde febrero. Una lesión en su rodilla lo hizo apartarse de las canchas y pasar por el quirófano para solucionar su dolencia física. Mientras estaba en la rehabilitación, consumió un "suplemento de venta libre" que tenía un ingrediente prohibido por la organización. Esto hizo que desde la liga lo sancionaran con 20 partidos por la violación del programa antidrogas. Ya pagó los primeros ocho partidos de castigo durante la temporada anterior y para el inicio de la siguiente debe estar fuera de la duela en los primeros 12 enfrentamientos.
El pívot habló para los medios estadounidenses sobre todo lo que le ocurrió en la anterior temporada y lo que espera para la siguiente. “No jugué bien. Perdí mi confianza. Pero volveré a ser yo el próximo año. No voy a abandonar. Conozco Nueva York y sé que puedo hacer las cosas bien, protagonizar una gran historia en mi regreso”, indica Noah.
Phil Jackson fue ampliamente criticado por contratar a Noah y también por el estilo de juego de Knicks quienes se quedaron por cuarto año consecutivo fuera de playoffs y con una plantilla que daba para más.
“Es duro ver lo que ha pasado porque tengo mucho respeto hacia Phil. Fue él quien me dio la oportunidad de regresar a casa. De pequeño me leí todos sus libros. Era un gran fan suyo y lo sigo siendo. Las cosas no funcionaron. Es algo que apesta, pero tengo que vivir con ello. Él creyó en mí y le dejé caer. Resulta frustrante. Recibió muchas quejas de que todo era su culpa. Pero nosotros no perdimos todos esos partidos por Phil Jackson”, expresa el jugador de 32 años.
Ahora tratará de limpiar su imagen tras lo acontecido con el suplemento prohibido por la NBA. “Pensé que podía tomar algo que me ayudaría y que no estaba en la lista de sustancia prohibidas, pero resulta que el producto contaminado de una sustancia que sí lo está. Fue algo muy duro. Normalmente acudo a los médicos del equipo, pero esa vez lo hice por mi cuenta y he acabado afectando a mucha a gente a la que quiero y a mi familia. Eso me dolió más que perjudicarme a mí o a mi reputación. Duele ver cómo tantas personas se sienten perjudicadas. Tendré que aprender a vivir con ello durante el resto de mi carrera”, concluye "El Gladiador".
FUENTE: basket4us.com