Rowerth Goncalves
Cocodrilos de Caracas y Panteras de Miranda fueron los conjuntos que menos importados utilizaron durante la campaña 2015-2016 de la Liga Profesional de Baloncesto de Venezuela. Solo seis jugadores foráneos vistieron el uniforme saurio, mientras que los demás equipos tuvieron un promedio de ocho extranjeros.
La triada extranjera que comenzó el torneo estuvo integrada por dos conocidos del baloncesto criollo, Carl Elliot y Kris Lang. El primero se quedó durante toda la campaña. El segundo no tuvo suerte esta zafra y partió rumbo a Argentina.
El tercer extranjero era un exNBA que llegaba como una incógnita: Anthony Mitchell. El jugador de Wisconsin se convirtió en el pilar del elenco caraqueño a la hora de repeler los ataques del contrario y se alzó con el premio al Jugador Defensivo del Año y con el liderato de bloqueos.
Luego de la salida de Lang, los capitalinos trajeron al conocido Julian Sensley, pero este no tuvo buenas actuaciones y fue cesanteado.
El penúltimo en llegar fue el californiano Wendell McKines, quien con su ferocidad dentro del tabloncillo y su aguerrida forma de jugar se ganó el respeto del cuerpo técnico y sus compañeros, así como el cariño del público. El “Torito”, Elliot y Mitchell se convirtieron en un trío de importados temibles en esta liga. Casi 70 % de los puntos de Cocodrilos venían de la mano de sus jugadores foráneos.
En la final de Conferencia ante Guaros de Lara, y luego en la serie decisiva frente a Bucaneros de La Guaira, los tres importados se combinaron para liderar al equipo saurio al sexto campeonato de su historia.
Wendell McKines, quien venía de jugar en Corea y era todo un misterio para el baloncesto caribeño, caló muy bien en el funcionamiento del técnico Néstor Salazar. Incluso ‘Mamá Osa’ llegó a decir: “si botan a McKines me tienen que botar a mi”. El californiano fue el Más Valioso de la final, al promediar 23 puntos y 10 rebotes por encuentro.
Cuesta arriba
Carmelo Cortez, presidente de la Federación Venezolana de Baloncesto, reafirmó que la próxima zafra de la LPB, que comenzará a más tardar el 15 de octubre, se jugará con dos extranjeros en la cancha, pero Cocodrilos de Caracas podría tener un as bajo la manga para mantener al tridente. El gerente general, Rostyn González, aclaró que hay posibilidades de que el equipo saurio nacionalice a Elliot para la venidera campaña. “No descartamos la nacionalización de Carl (Elliot). Sería beneficiosa hasta para la selección”, dijo González, quien esperará la reunión de gerentes para decidir.