Serge Ibaka, pívot de la selección española, no se fía de los pívot franceses que son más bajitos, salvo los jóvenes Lauvergne y Gobert, "pero que corren mucho".
"Francia es un equipo difícil con pívot pequeños pero fuertes físicamente y que corren mucho", dijo Ibaka.
"Va a ser un partido diferente al de Brasil. Nosotros estamos mejorando a cada partido que jugamos y seguimos haciendo nuestro trabajo sabiendo que no será fácil ganar a los franceses", añadió el pívot de Oklahoma en la NBA.
Ibaka está siendo uno de los jugadores más apoyados desde la grada del Palacio municipal de deportes de Granada.
"Es algo que agradezco mucho y la verdad es que me ha sorprendido un poco. Muchas gracias a todos por sus ánimos", ofreció.
El pívot habló de lo que tiene que mejorar la selección para ganar a Francia.
"Vamos a jugar contra un equipo muy físico y veloz. Tenemos que mejorar nuestra defensa en el contragolpe y en el uno contra uno", afirmó.
Ibaka no tuvo problemas en declarar que tenía "ganas de revancha" por la derrota del año pasado en semifinales en el Eurobasket de Eslovenia.
"Sí, tengo ganas de revancha. Aunque no pude estar el año pasado en la selección, nos ganaron y este año no puede volver a pasar. Ayer conseguimos una importante victoria ante Brasil, pero sabemos que todavía falta mucho", comentó.
El juego interior español pasa por ser, quizás, el más potente del Mundial.
"No lo sé. Lo que sí sé es que cuando Navarro o Rudy las enchufan desde fuera se crean más huecos en ataque y es más fácil la labor de los pívots. Es una cuestión de equipo, como todo", subrayó.
El jugador no quiso hablar de Estados Unidos y de la final que todo el mundo espera.
"Ya veremos a Estados Unidos cuando llegue, si es que llegan ellos y nosotros a la final. Todavía falta mucho", explicó.
Ibaka cada vez está más integrado en el equipo y se le ve cómodo en la pista.
"La verdad es que, de momento, estamos disfrutando. La experiencia de jugar un Mundial en casa es increíble, con nuestros aficionados empujándonos y con las gradas llenas. En cuanto a mí, cada vez estoy más cómodo en el equipo. Aquí hay confianza, amistad, talento y esfuerzo y todo cuenta para ser mejores. Estoy muy contento", concluyó Serge Ibaka. /EFE