Incluso con el talento y la experiencia del entrenador Gregg Popovich, los Spurs enfrentan un futuro incierto.
Sólo cinco jugadores tienen contrato para la próxima temporada. Tim Duncan y Manu Ginóbili no han decidido si regresarán o pondrán fin a una trayectoria que seguramente los enviará al Salón de la Fama. Kawhi Leonard, quien se perfila como la piedra angular de la nueva generación, volvería con el plantel, pero es agente libre restringido y viene de ganar el premio al Jugador Defensivo del Año, apenas una temporada después de que se le eligió el Jugador Más Valioso de la Final de la NBA.
Sería el panorama más complicado que haya vivido el equipo durante los 19 años de gestión de Popovich, en una franquicia que se ha convertido en un ejemplo de regularidad para toda la liga.
Y Popovich está ansioso por dar soluciones.
"Desearía que las prácticas comenzaran la semana próxima", expresó. "Uno hace esto durante tanto tiempo que sabe ya el tipo de película que quiere mostrar a los jugadores para comenzar en septiembre, y las cosas en que desea trabajar. Así funciona el cerebro de un entrenador. Pero probablemente lo mejor es tomarse una pausa y no hacer nada. Trataré de hacer eso".
Popovich lució jovial, nostálgico y meditabundo el lunes, durante la conferencia de prensa que marcó el final de la campaña para los Spurs, cinco0 veces campeones de la NBA. / AP