Luis Hurtado
Ser un veterano en la NBA es algo valorado. Para un jugador es ventajoso ya que se cuenta con la experiencia que no tienen muchos novatos y que es necesaria para cualquier equipo en el tabloncillo.
12 años de carrera y tan solo dos equipos para David West demuestran que es un jugador que se entrega al equipo. Jugó sus últimas cuatro temporadas con los Pacers de Indiana pero quizás llegó a la conclusión de que con 34 años ya es hora de ganar un anillo.
Y esto es lo que realmente tiene valor para West. Lo dejó claro al rechazar una oferta de 12 millones de dólares de los Pacers para la 2015-16 para firmar un contrato por el salario mínimo con los Spurs de San Antonio, alrededor de 1.5 millones.
Equipos como los Cavaliers de Cleveland, los Warriors de Golden State y los Wizards de Washington llegaron a ofrecerle más dinero al experimentado jugador pero este se decantó por una de las dinastías de la liga.
“En este punto de mi carrera todo se trata de ganar. No quiero estar en una posición en la que solo estamos luchando por estar en los playoffs. Quiero estar en un sitio en donde legítimamente podamos saborear la final” declaró West recientemente en una entrevista en Indianapolis.
West promedió en su última campaña 11.7 puntos y 6.8 rebotes por partido más una efectividad de 47.1 por ciento en tiros de campo.
Definitivamente y decididamente los Spurs de San Antonio están armando un equipo de postemporada. Tim Duncan y Manu Ginobili siguen en la plantilla al igual que Kawhi Leonard y Danny Green sin olvidar la adquisición de LaMarcus Aldridge y ahora David West.
2015-07-06